martes, 1 de diciembre de 2009
El Defensor del Calamidad
De los Graben y el fin de Vengaree capitan del Calamidad... (II)
Dolin nos contó que todo fue rápido, silencioso que los cogieron por sorpresa, mientras dormían, que los superaban ampliamente en numero, y que no les dio tiempo a responder, la carnicería tuvo lugar mientras eramos atacados en el pueblo, fueron momentos duros, todos estábamos desolados, irritados, furiosos, aquello era más de lo que podíamos soportar, juramos acabar con aquellos infames seres, si ya antes teníamos intención de aclarar aquel entuerto, ahora era algo que no podíamos dejar pasar.
Tras unos momentos de raba poco contenida, empezamos a pensar como podríamos luchar contra estos seres, lo primero que hicimos fue mirar el cadáver del Graben que Vengaree había dado muerte, tras estudiarlo comprobamos que estas criaturas no estaban vivas, que estaban creadas con partes de seres humanos, cosidas con esmero, como lo haría un medico al curar las heridas, ya Sunthas descubrió que no tenían aura, su cuerpo no parecía tener sangre, lo que descubrimos más importante fue que en su pecho tenia cosido una runa extraña que tras muchos estudios, que nos costo descifrar pues era difícil para nosotros saber de ella, era un portal de entrada para seres oscuros, esto nos dio la contestación a porque un hombre de corpulencia normal aguantaba golpes y resistía como si fuera una pared, algo en el lo que lo ocupaba y le daba poder, no era humano, nos enfrentábamos a un gran peligro y estábamos solos.
Mientras nosotros nos encontrábamos en esta situación Adrahil, encontró en el cementerio del pueblo algo más, también muy inquietante, vio como unos graven desenterraban un cadáver, e intento alertar al sepulturero aunque sin conseguirlo, pues no quería alertar a los graven, también encontró el rastro de la hacienda de los graven, y regreso para contárnoslo.
Una vez que decidimos que irisamos a destruir a estos seres, dejamos a la familia y a los dos supervivientes dentro de la compuerta de la bodega, la tapamos con cajas, y fuimos al pueblo, mientras Adrahil y Gulthar inspeccionaban la hacienda, nosotros Sunthas, Forak, Dolin y yo esperábamos en la posada, en el pueblo, todo parecía ir con normalidad, como si los habitantes nada supieran de lo que pasaba, esto nos inquietaba aún mas, pues no creíamos que pudiéramos contar con ellos.
A la hora pactada salimos al encuentro de nuestros exploradores, después de un descanso poco reparador, el pueblo estaba repleto, como si nada pasara, tuvimos que escondernos pues un grupo de unos veinte graben todos vestidos igual que los que nos habíamos enfrentado bajaba por la calle del pueblo, hablaban con la gente como si nada, era extraño, yo quería enfrentarme a ellos, pero todos veían que era algo descabellado enfrentarnos en medio de la gente, pues los ciudadanos podrían no entender nuestro ataque, mas eramos cuatro contra veinte y esos seres eran muy fuertes, así que los dejamos atrás y nos encontramos con nuestros compañeros, estos nos explicaron lo que habían descubierto, y trazamos un plan para entrar en la gran mansión pues los graven rondaban en numero los ochenta y no podíamos hacerles frente sin entrar de una manera solapada y astuta, evitando el enfrentamiento directo. Llego la noche y emprendimos el asalto, eso sera otro relato...
lunes, 30 de noviembre de 2009
De los Graben y el fin de Vengaree capitan del Calamidad... (I)
Comenzare por nuestra llegada, en una profunda noche, sin luces al puerto, dejamos al Calamidad alejado del mismo, nos dirigimos en silencio y sin encender candiles al puerto, antes de llegar Adrahil se protegió contra el frió y con un sigilo digno de su profesión de montaraz se sumergió en las gélidas aguas para acercarse furtivamente a la orilla sin que nadie se percatase de ello, mientras llegamos a la pasarela del puerto, os describiré que nos encontramos allí, una cantidad de guardias vestidos de negro a lo largo de pasarela, que nos extraño a esa hora de la noche, no tardaron en acercase a nosotros nada mas abandonar el bote, el dialogo fue corto y poco amigable, de echo nos pidieron que abandonáramos el pueblo y que entregáramos a Vengaree para ajusticiarlo, !os podéis imaginar nuestra reacción! pero más increíble fue la de ellos, en una increíble parsimonia los 16 guardias deslizaron al unisono sus ropajes negros con su brazo izquierdo y sacaron todos grandes hachas de guerra con su brazo derecho, fueron rapidísimos, lo hicieron sin mediar palabra, sin un gesto , sin nada que pareciera una señal, y nos atacaron antes de que nosotros lo hiciéramos a ellos, su rapidez nos sorprendió, aunque sus movimientos eran poco ágiles su rapidez era mortal, y su fuerza enorme, parecían muñecos dirigidos por alguien, sorprendentemente cada golpe que le asestábamos parecía no afectarles, no sangraban, sus carnes, sus huesos machacados por tremendos golpes, no parecían provocar dolor ni siquiera problemas motrices en ellos, fue algo atroz, nuestro primer encuentro con estos seres, no gemían, no parecían sentir dolor, acabamos con todos (eso creímos) con la ayuda de Adrahil desde la orilla.
Rápidamente fuimos hacia la casa de la niña fallecida, Adrahil junto con Gulthar usaban sus habilidades para no ser vistos mientras Sunthas, Forak y yo avanzavamos por la calle poco alumbrada junto a la playa, cuando llegamos a la casa y llamamos nadie contestaba, pero eso nos dio que pensar, ninguna casa parecía tener el fuego encendido, en pleno invierno y con el frió que hacia, nos temimos lo peor, sin pensármelo dos veces, derribe la puerta, y encontramos a la familia en un rincón, encabezada por el padre enarbolando un cuchillo en actitud protectora, que intento atacarme para defender a su descendencia, evite el ataque y lo desarme, lo calmamos le explicamos que eramos amigos, le pedimos disculpas por las formas, mientras intentábamos explicarle todo apareció un grupo enorme de individuos, graben a todos los efectos y nos parapetamos en la casa, mientras Gulthar y Adrahil ocultos arriba de la casa tomaban posiciones.
Nos superaban ampliamente en numero, nos fortificamos en la puerta, realizamos un hueco en la pared de al lado para pasar en caso necesario a la familia a la otra casa, pusimos muebles protegiéndolos, y nos dispusimos a hacerles frente, el jefe del grupo, ordeno atacar y rechazamos los intentos, luego entro el y comprobamos su poder, esa criatura era una persona, pero su poder estaba fuera de lo que su cuerpo parecía ser, gracias a Sunthas que aguanto su envestida, mientras Forak y yo acabáramos, con los que entraron con él, luego lo hicimos retroceder, y tras unos grandes golpes de Sunthas, se parapeto tras un carro, rodeado de sus seguidores con increíble rapidez, aprovecho entonces Sunthas para usar su arco de acero, con el que destrozo el carro, junto con Gulthar que usando su ballesta destrozaba a graben y carro según disparaba, esto hizo huir al líder, junto con sus hombres, aunque no llego muy lejos y cayo victima de las flechas de nuestros compañeros.
Tras esto nos apresuramos a regresar al Calamidad, para poner a salvo a la familia, según nos encontrábamos mas cerca sentíamos que algo no marchaba bien, subimos a bordo, tomando precauciones, y lo que vimos fue horrible, os lo contare en otro momento...
martes, 20 de octubre de 2009
Cambio de aires
Como bien saben los usulunis hemos hecho una pequeña parada en nuestro periplo para atender el resto de nuestros quehaceres diarios. Sunthas de maniobras, Adrahil que se marcha cruzando desiertos y montañas al otro lado del mundo, mientras Din y Gulthar se mantienen en sus puestos.
Un servidor coge sus bártulos, recuerdos y mucha ilusión y vuela, no muy lejos, pero si lo suficiente para comenzar de nuevo en una nueva posada. Esperemos que esta espera no se alargue demasiado y que los usuluni vuelvan a entonar sus gritos de batalla para vender caro su pellejo ante los temibles Graben.
Nos mantendremos en contacto, usulunis, la fecha y hora es meramente orientativa ya que, como sabeis, depende de muchos factores. Contadme.
ACTUALIZACIÓN. Adrahil se dispone a luchar de nuevo en la fecha acordada, tan solo depende de que consiga una buena conexión a internet para ese día. Cuando se acerque el momento os diré como llegar a la nueva posada. Hail.
viernes, 9 de octubre de 2009
La habitacion de Mithril y el engaño de los Khazad
domingo, 4 de octubre de 2009
Los tres Guardianes.
Despues de una bifurcacion llegamos a tres pasillos, todos ellos como los anteriores, angostos y pequeños, incluso Dîn, debe encorbarse un poco, de todas formas no es de extrañar, para ser un enano es de gran corpulencia. Uno de los pasillos daba a una especie de colector de las alcantarillas, una extraña balsa de agua sucia y moho, donde seguramente llegaban las aguas de varias alcantarillas. Otro pasillo daba a una extrana abertura en el techo, que una vez abierta nos adentraba en una habitacion con un derrumbe, Dîn estuvo inspeccionando las paredes, la habitacion y el derrumbe, e incluso usamos la segunda vision, para descubrir el motivo de aquella habitacion y que podia haber al otro lado. Solo sacamos una conclusion, agua. Debo resaltar que Gulthar se obsesiono demasiado con ella, insistiendo en que detras de ella deberia haber algo, pero por mucho que mirabamos no encontrabamos indicios de ello, es mas, cualquier intento de liberar parte de los escombros conllevaria una avalancha mortal de agua. Pero el insistia, este Gulthar, a veces pienso que le pueden demasiado las riquezas y los objetos, aun recuerdo el incidente del Martillo, y lo que sufrio a partir de ese dia.
Despues de descartar esa habitacion y de no inspeccionar el colector, como insisti varias veces, decidimos ir por el pasillo principal. Pero detectamos algo extraño, unas voces, unos sonidos y nos pusimos en alerta, llegamos a descubrir tres presencias a unas decenas de metros, y muy poderosas, especialmente una de ellas.